dissabte, 31 de juliol del 2010

El PP propone la restricción del derecho de huelga

EL PP PROPONE, ENTRE OTRAS COSAS, QUE SE NO PUEDA HACER HUELGA MIENTRAS SE ESTÁ NEGOCIANDO UN CONVENIO COLECTIVO

La reforma laboral superó en el Congreso el trámite de las enmiendas a la totalidad, pero hasta el dia 29 por la tarde los grupos tenían plazo para presentar sus enmiendas parciales a la reforma.
Hemos conocido las del Partido Popular.
Con la enmienda que propone el PP, por la que se modifica el artículo 86 del Estatuto de los Trabajadores, no sería posible que los trabajadores pudieran utilizar la huelga u otro tipo de protesta como mecanismo de presión durante la negociación de un convenio colectivo.
Es decir, que lo que propone el principal partido de la oposición es poner límites al derecho de huelga. Una cuestión que, en el resumen de sus enmiendas que envió a la prensa, el Partido Popular evitaba mencionar.
Pero las propuestas del PP van más allá: quieren que, en caso de dificultades económicas, una empresa pueda descolgarse totalmente del convenio que le sea de aplicación. La reforma propuesta por el Gobierno limita el descuelgue en caso de problemas económicos a las subidas salariales que establezca en el convenio.
Además, el PP propone que el contrato con indemnización por despido de 33 días por año trabajado se generalice aún más de lo que quiere el Gobierno: con su propuesta solo quedarían excluidos quienes lleven menos de 15 días en el paro. El PP pone además sobre la mesa que el contrato en prácticas se desvincule a la formación o los estudios del trabajador.
Finalizado el plazo para presentar enmiendas a la Reforma Laboral, lo más concreto que propone el PP es:
1. Pedir que un contrato por obra y servicio pueda durar hasta 5 años.
2. Que el FOGASA no asuma parte de las indemnizaciones por despido.
3. Y algo tan genérico como que la inspección de trabajo apruebe, en 2 meses, un plan contra la discriminación salarial de las mujeres, de la que jamás se ocuparon en sus 8 años de gobierno.
Así se desmienten las proclamas de que el PP es el partido de los trabajadores. Asímismo se comprueba que al PP no le gusta las huelgas de los trabajadores a sus empresarios para obtener mejoras salariales sino que solo le gustan las huelgas contra el gobierno socialista acusando reiteradamente a UGT y CCOO por no convocarlas.